Cuando tu mundo se caiga a pedacitos, agarrate de la locura.


viernes, diciembre 17, 2010

Dormir en el barrio de Flores es una experiencia notable. Todos sabemos
que allí se sueñan cosas muy extrañas. Las causas de este fenómeno han sido
examinadas por tratadistas de toda laya.
Los meteorólogos, astrólogos y vendedores de elixires han creído
explicar el asunto sosteniendo que los cuerpos celestes y los vientos cruzados
ejercen fuertes influencias sobre las mentes soñadoras.
Los medicos y sacamuelas insisten en que la culpa es del ruido
provocado por los automóviles y las bandas de patoteros que noche a noche
recorren la barriada tirándole piedras a la luna.
Naturalmente, estas teorías no seducen a los hombres sensibles. Estos
prefieren creer en la responsabilidad del Angel Gris. Y en realidad, apenas cabe
dudar que el Angel reparte sueños desde el anochecer hasta el alba.
Tiene una canasta llena. Allí hay sueños para todos.
Sueños rosas para las ingenuas de la calle Artigas. Sueños blancos para
los pibes y sueños rojos para los violentos.
Hay sueños agujereados de despertares. Hay sueños sin sueños que son
como una larga cinta negra. Y sueños usados para los que siempre sueñan lo
mismo.
Sueños frescos, sueños maduros. El Angel tiene sueños buenos y malos.
Tiene uno uno tan terrible que si uno no despierta a tiempo, se muere. Tiene
otro que dura cinco días y cinco noches. Y tiene un sueño tan corto como un
suspiro: quien lo sueña, sueña que suspira.
El Angel Gris elige sueños para cada uno de los que se atreven a dormir
en Flores.
Sin embargo, hay quienes se han atrevido a negar este hecho
indiscutible. Me estoy refiriendo a los Refutadores de Leyendas, una abominable
secta racionalista de Villa del Parque.
Se trata de individuos terribles. Pasan la vida haciendose contar viejas
historias y mitos para luego demostrar su falsedad.
Alguien les dice:"En Flores hay un joven que vuela. Se llama Luciano."
Ellos, en lugar de mirar al cielo, se ponen a razonar implacablemente. "Los
hombres no vuelan. Luciano es un hombre. Luego, Luciano no vuela." Los
Refutadores de Leyendas no se limitan a demostrar que el mundo es razonable
y científico, sino que tambien lo desean así. (Este es seguramente su peor
pecado).
Los miembros de esta sociedad mantienen una constante polémica con
los Hombres Sensibles de Flores y los hostilizan con teoremas perfectos y
demostraciones olímpicas. Pero los Hombres Sensibles no creen en ninguna
razón que no los haga llorar, y entonces hacen pedorreta a los Refutadores de
Leyendas.
Pero en tantos años de lucha, la labor refutadora a alcanzado algunos
exitos. Los pibes de Flores (de modo especial los que viven de Rivadavia al
norte) casi no creen en duendes, hadas, brujas, ogros y gnomos. Es el resultado
de la incesante predica de los Refutadores en los recreos y a la salida de los
colegios.
Se sabe que algunos chicos son integrantes de la secta, con la oprobiosa
anuencia de sus padres. Pero tambien es cierto que muchos ancianos renuncian
a sus cargos: quien conoce a fondo los mecanismos de la razón, acaba por
desconfiar de ella.
Desde luego, los Refutadores de Leyendas no creen en el Angel Gris y
-más aun- sostienen que no es cierto que se sueñe en Flores de un modo
diferente.
Durante mucho tiempo se ha realizado toda clase de experiencias para
indagar la verdadera naturaleza de los sueños de Flores.
Los Refutadores han dormido cientos de veces en el barrio y declaran
que han soñado más o menos lo mismo que en Villa del Parque.
Los Hombres sensibles piensan que es precisamente el ngel Gris que
ha elegido para ellos sueños anodinos y vulgares, a modo de castigo. Manuel
Mandeb, pensador del que conviene desconfiar, es autor de una monografía en
la que se registran algunos sueños interesantes. Veamos: "Durante mucho
tiempo, el poeta Julio C. Del Prete estuvo perseguido por el mismo sueño: se
veía a sí mismo escribiendo un poema perfecto. Las palabras despertabn en el
emociones indescriptibles. Pero Del Prete no recordaba el poema al despertar.
Una noche tuvo la ocurrencia de acostarse con un lápiz y un papel. Cuando soñó
la poesía hizo un esfuerzo colosal y despertó llorando. Medio dormido escribió
las palabras que había soñado. A la mañana siguiente las leyó. De cualquier
manera, nadie pudo enterarse jamás de la forma del poema perfecto: Del Prete
se volvió loco y permaneció mudo hasta su muerte, ocurrida catorce días
despues...
"Todos los lunes, el profesor Galeano sueña que es martes. Los martes
sueña que es miercoles; los miercoles, que es jueves y los jueves, que es
viernes.
Esto le provoca innumerables trastornos...
"Todas las noches, cuando se acuesta, la señora de Pertot oye que tocan
el timbre. Pero jamás alcanza a atender, porque un instante despues se duerme.
No cabe duda: el que toca es el ngel Gris...
"Cierta noche de 1970, Ricardo Salzman, el jugador de dados, soño con
el número 18... Un rato más tarde -en otro sueño o en el mismo- se le presentó
el número 41. Al día siguiente Sazman resolvió jugar todo cuanto tenía a los
dos números. Pero, en el último instante, siguiendo una inspiración, jugó
únicamente al 18. Salió el 89..."
Manuel Mandeb cita mil ochocientos casos verdaderamente sugestivos.
Pero hay que reconocer que despues de leer su monografía uno queda más
fatigado que convencido.
Los Hombres Sensibles dicen que el Angel Gris favorece con buenos
sueños a sus protegidos y castiga con pesadillas a sus enemigos.
Pero sucede que el Angel tiene ideas muy especiales acerca de lo que
es deseable.
El piensa -por ejemplo- que la melancolía es una gran cosa y que estar
triste es maravilloso. Entonces les obsequia a sus sombríos favoritos nuevas
lágrimas y pesadumbres cada noche. Por eso en Flores hay tantos muchahos
tristes y tantas novias de tango.
Un asunto que tambien se discute mucho es el recorrido que sigue el
Angel Gris.
Hay quienes afirman que comienza en Gasca y Gaona y que progresa
hacia el Sudeste. Otros aseguran que el primer sueño lo entrega en Boyacá y
Avellaneda, y el último -casi a las seis- en San Pedrito y Bilbao.
Los Refutadores de Leyendas arguyen que la gente se duerme en Flores
de un modo caótico y que este desorden demuestra la inexistencia del Angel.
Cabe aclarar que la corriente más actualizada de Hombres Sensibles coincide
con los Refutadores en que la gente empieza a soñar en cualquier momento, pero
atribuye este hecho a los caprichos del Angel Gris, que -según parece- es
un ángel negligente y hasta mugriento.
No faltan en este apasionante caso las opiniones interesadas y
envidiosas.
Ciertos habitantes de Belgrano se han atrevido a comparar los sueños
de ese barrio con los de Flores.
Esto no resiste el más ligero análisis. Calquiera que halla dormido en
las dos zonas puede certificar que los sueños que reparte el Fantasma de
Belgrano no tienen gracia ninguna y algunos son vulgares copias de sueños ya
inventados por el Angel Gris.
La leyenda del Angel Gris de Flores asegura que, a medida que pase el
tiempo, los sueños serán más largos y las vigilias más cortas. Hasta que
llegará el día en que el barrio de Flores no hará otra cosa que dormir y soñar.
Y los Hombres Sensibles soñarán que un Angel los acaricia con sus alas
y los Refutadores de Leyendas soñaran que están despiertos y que los ángeles
no existen.